En atención a la creciente preocupación sobre la confianza en...
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Crece la incidencia de cáncer en personas jóvenes
Conclusión práctica
El cáncer se diagnostica habitualmente en personas mayores de 50 años. Sin embargo, los últimos datos del mundo real muestran un aumento de la incidencia de algunas neoplasias en personas entre 20 y 49 años, es decir, de cáncer de aparición temprana. Es de vital importancia seguir recabando información que ayude a comprender este fenómeno. Aunque la incidencia y mortalidad de cáncer en cifras absolutas son mayores cuanto más avanza la edad, el impacto individual, social y económico es mucho más profundo en los pacientes jóvenes, que además necesitarán los recursos adecuados para lidiar con las secuelas de la enfermedad durante más tiempo. Se requerirán acciones a nivel sanitario, político y social para hacer frente a este problema de salud pública y desacelerar la tendencia en generaciones futuras.
Metodología
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En un hospital de Málaga, se revisaron todos los pacientes diagnosticados de 18 tipos diferentes de cáncer entre 1998 y 2021 para tratar de obtener más información sobre esta tendencia. En cada tipo y año, se calculó la proporción de pacientes diagnosticados que eran mayores y menores de 50 años. Adicionalmente, se repitió la operación disminuyendo el límite de edad a 45 y 40 años.
Resultados principales
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La incidencia de todos los tumores aumentó en todos los grupos etarios en el periodo estudiado y, en valores absolutos, fue mayor en los pacientes que superaban los 50 años. Sin embargo, la media de ese incremento anual fue mayor en los pacientes con cáncer de aparición temprana en los siguientes tipos: cabeza y cuello (6,1% frente a 4,6%), colon (11,0% frente a 8,2%), testicular (16,3% frente a 13,1%), linfoma no Hodgkin (8,4% frente a 5,9%), recto (16,1% frente a 6,8%), riñón (27,8% frente a 20,1%) y sarcoma (43,4% frente a 28,6%).
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Si se disminuye el punto de corte a 45 años, se confirma lo anterior y se añaden otras neoplasias, como de cérvix, melanoma, ovario y páncreas.
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En menores de 40 años no se observaron los mismos incrementos, aunque esto podría deberse al pequeño tamaño de ese subgrupo.
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Es igualmente importante destacar que, en este estudio, los pacientes más jóvenes no se diagnosticaron en estadios más avanzados. De hecho, algunas neoplasias se diagnosticaron en estadios más precoces que en sus contrapartes.
Enfoque clínico
Aunque estos resultados difieren en algunos puntos con otras publicaciones, todas coinciden en que la tendencia al alza en la incidencia del cáncer temprano es un fenómeno global, cuyas causas subyacentes no se conocen por completo. La implementación de los programas de cribado puede haber desempeñado un papel en algunos tumores, como próstata o tiroides, pero esta relación solo se observa en algunos países, y no se realiza cribado en todos los tipos implicados. Otra hipótesis gira en torno a la evidencia creciente de que las fases más precoces de la carcinogénesis se producen durante la infancia y la juventud, por lo que la exposición a determinados factores de riesgo a edades tempranas podría tener consecuencias importantes en etapas posteriores de la vida. Algunos de estos factores de riesgo son cambios en la dieta y en el estilo de vida (alimentos procesados, bebidas azucaradas, sedentarismo, disminución de las horas de sueño), así como cambios medioambientales o en la microbiota (relacionado con el uso excesivo de antibióticos). Todos ellos influyen en una mayor prevalencia de obesidad, por lo que no resulta sorprendente que la mayor parte de los tumores de aparición temprana a nivel global se relacionen con ella.
Fuente: El artículo se publicó en versión electrónica el 21 de marzo de 2024 en JCO Global Oncology.