Una cuarta ola de COVID-19 para México, ¿cuál es el panorama actual?

CIUDAD DE MÉXICO, MEX. La posibilidad de tener una cuarta ola en México está presente. Con la reactivación de actividades sociales, de entretenimiento y económicas, mismas que se unen a la temporada invernal, en la que aumentan los casos de enfermedades respiratorias, los especialistas proyectan un pico entre finales de diciembre de 2021 e inicios de enero del 2022.

Cristian Morales, representante de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) en México, ha señalado que en las próximas dos o tres semanas podríamos estar observando el efecto de eventos masivos como el Gran Premio de la Fórmula 1: “En diciembre y enero, periodo invernal, es altamente probable que experimentemos una nueva ola de COVID-19”.^[1]

Además el representante de la OPS confirmó una tendencia al alza en el número de casos activos de COVID-19 en parte de México. “Se observa en el norte del país un cierto cambio de tendencia con el color amarillo en varios de sus estados pero también alrededor de 16.000 casos activos que son siempre una fuente de preocupación. Es el momento de no bajar la guardia se debe continuar con la vacunación y con el respeto a las medidas no farmacológicas de protección para poder tener unas fiestas decembrinas seguras y sanas”.

Hasta el momento cinco estados de la República Mexicana se encuentran en amarillo, esto son: Baja California, Sonora, Chihuahua, Durango y Aguascalientes. Los otros 27 se encuentran en semáforo verde hasta el momento.

Morales destacó que por primera vez, México no aparece dentro de los seis países de la región que encabezan la lista de más contagios y muertes. “México pasa por un buen momento de la epidemia. Los países con más contagios son: Estados Unidos, Colombia, Argentina, Perú, El Salvador y Chile”.

De acuerdo con los datos de la Secretaría de Salud, México llega a este periodo, al término de la semana epidemiológica 48, con un incremento de un punto porcentual en el número de casos estimados de COVID-19, en comparación con el periodo previo. México acumula 3’933.366 casos de COVID-19 y 297.658 defunciones totales. En los últimos 14 días, 18 mil 966 personas presentaron signos y síntomas. En cuanto a la ocupación de camas generales subió un punto porcentual para situarse en 16%, y la demanda de camas con ventilador mecánico se mantiene sin cambio, por lo que se ubica en 12%.

Desde el mes de noviembre el secretario de Salud, Dr. Jorge Alcocer Varela, declaraba no descartar una cuarta ola de contagios y aunque el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Dr. Hugo López-Gatell Ramírez aseguraba que la reducción de la curva epidémica disipaba la posibilidad de una cuarta ola en el país, ahora ambos funcionarios de salud a cargo de la pandemia en el país coinciden. “Mientras siga activa la epidemia de COVID-19 no se descarta que vuelva a existir una cuarta, quinta o más olas de contagios” en México como en otras partes del mundo, dijo el subsecretario.^[2]

También coincidió en que la época de frío podría causar un incremento en casos de COVID-19 debido a que se trata de un virus que afecta el sistema respiratorio, “la infectividad es más prolongada porque cuando hay temperaturas bajas las gotas y aerosoles que viajan a través del aire quedan suspendidos y permanecen más tiempo en el ambiente”, explicó. Pero esta época invernal no sólo podría causar un repunte de COVID-19, sino de cualquier enfermedad respiratoria.

Ómicron otro factor de preocupación 

De acuerdo con el Dr. Mauricio Rodríguez, vocero de la Comisión Universitaria para la Atención de la Emergencia del COVID-19 de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en México ya se registran indicios de la cuarta ola de COVID-19, pero todavía no hay transmisión sostenida, por lo que el reto es evitar que la variante ómicron encuentre condiciones óptimas para su transmisión.^[3]

“Lo que podría pasar es que ómicron encuentre condiciones favorables para su transmisión en caso de que se relajen las medidas durante las próximas semanas… No tenemos ahorita una etapa de actividad epidémica fuerte, entonces sí ahí le cerramos la puerta a la variante ómicron podemos hacer que su introducción y llegada sea más lenta y que avance también la cuarta ola más lento”, señaló, por ello clave que las siguientes semanas las personas se cuiden más.

Agregó que es difícil alcanzar a visualizar la ola nacional porque el país es muy grande, sin embargo, ya se empiezan a registrar cambios en las olas como el norte del país, que ya tiene varias semanas con aumento en la actividad epidémica. Para el experto es claro que ya cambió la tendencia y son datos tempranos de que ya empezó la cuarta ola.

El Dr. Samuel Ponce de León, coordinador de la Comisión Universitaria, coincide con la necesidad de poner atención a la variante, pues aunque se tenía contemplada una cuarta ola de Coronavirus en el país, no se tenía considerada que entrara ómicron, por lo que, estimó, podría haber más contagios de los previstos.^[4]

Al confirmarse el primer caso de la variante ómicron en México “es posible que haya más casos”, pero todavía no han sido detectados, por lo que se espera que en los próximos días aparezcan. Dijo que es probable que esta nueva variante del SARS-CoV-2 se apropie del espacio que estaba ocupando delta, aunque eso no quiere decir que los contagios bajen, al contrario, porque se ha demostrado que ómicron es muy contagiosa.

El Dr. Alejandro Macías Hernández, especialista en medicina interna, infectólogo y catedrático de la Universidad de Guanajuato, en México, la nueva variante “podría sustituir a la delta y sería la primera vez que se destituye a esta, pero no sabemos si va a ocurrir; de no ser así, es muy difícil que tengamos un pico como los anteriores”.

Por ahora, “México está saliendo del pico de la variante delta” y aún se desconoce si son las variantes las que mueven las olas y si la nueva variante ómicron será tan fuerte como la delta. No obstante, se sabe que, sin importar las variantes los más susceptibles son quienes están falleciendo.

Recomendaciones decembrinas

El Dr. Rafael Bojalil Parra, investigador del Departamento de Salud de la UAM-Xochimilco, aseguró que la meta no está cumplida, como anunciaba el Gobierno a finales de octubre, al informar que 47% de la población estaba totalmente vacunada, y en lugares como la Ciudad de México, con más índices de contagios, alrededor de 83% de la población mayor de 18 años tenía al menos una dosis. Así, se esperaría que la cuarta ola fuera menos agresiva, pero el panorama no es el mismo para toda la población.

“Es muy probable que tengamos una cuarta ola, fundamentalmente a expensas de los menores de 40 años, por las variantes, por el invierno mismo, que normalmente las infecciones respiratorias son más frecuentes e intensas y por la falta de vacunación a poblaciones menores. Además todas las fiestas navideñas, todo esto va a provocar muy probablemente otra gran ola para mediados de enero”.

Al respecto la UNAM indicó que la mejor manera de evitar esta cuarta ola es siguiendo medidas sanitarias como: uso de cubrebocas, lavarse las manos, usar gel antibacterial y evitar reuniones en lugares cerrados.

Asimismo las autoridades universitarias destacan que aunque estamos cansados del confinamiento y en estas épocas queremos ver a nuestros familiares, debemos minimizar riesgos, para ello proponen:

• Realizar un plan para la reunión.
• Hablar con los familiares y amigos.
• Discutir si hay en el grupo personas vulnerables.
• Todos deberían estar vacunados (los que son candidatos para recibir la vacuna).

De cinco a siete días antes del evento hay que extremar las precauciones. Mantener el uso de cubrebocas de manera correcta, el lavado de manos o uso de alcohol en gel, mantener la distancia física y evitar reunirse en espacios cerrados sin ventilación.

Idealmente, y si es posible, las personas que no viven en la misma casa deberían realizarse una prueba de antígenos antes de juntarse a festejar.

Si alguna persona tiene síntomas compatibles de COVID-19 no tiene que ir, aun cuando el resultado de su prueba sea negativo.

“Aunque la vacunación ayudará a que la cuarta ola sea menos letal, no se puede descartar que habrá un repunte de casos, pues en todo el mundo se ha registrado un incremento de 20% desde los meses de octubre y noviembre, por lo que se podrían esperar a inicios de 2022 unos 700.000 casos por día en la región”.

Al respecto, la jefa de Gobierno Claudia Sheinbaum aseguró que la capital está preparada para enfrentar una eventual cuarta ola de contagios de COVID-19; que la ocupación hospitalaria está en 15%, por lo que “tenemos un rango muy amplio en caso de un repunte”.

https://espanol.medscape.com/verarticulo/5908271#vp_1

Créditos: Comité científico Covid